Más allá de las cinco estrellas que ha añadido a su escudo, el dominio felino en los últimos años es absoluto
Tigres es el amo y señor del futbol mexicano en la segunda década del siglo XXI. Por si quedaba alguna duda, la escuadra de Monterrey consolidó su etiqueta del equipo más ganador de los últimos 10 años este domingo en León.
Todos los ingredientes se han mezclado en la época reciente para la supremacía de los Felinos. Cuentan con una leyenda del banquillo en Tuca Ferretti, un extranjero histórico del futbol mexicano en Gignac, una directiva que ha sabido llevar a buen puerto al club, una afición incomparable y gran poder adquisitivo para armar una plantilla sumamente competitiva.
De 2011 a la fecha, el conjunto universitario ha incorporado 10 títulos nuevos a sus vitrinas, cinco de ellos de Liga MX, pero además, ha jugado 16 Finales tomando en cuenta a todas las competencias, lo que es fiel reflejo de la constancia regiomontana en el balompié azteca.
Todo comenzó en el Apertura 2011, donde se rompió la sequía de 29 años sin gloria en Liga MX. En aquella Final, Tigres dio cuenta de Santos con un categórico 4-1 global. Pero esto fue sólo un anticipo de lo que estaba por venir: la época dorada de la UANL.
Con la llegada del francés André-Pierre Gignac a México en 2015, los de amarillo y azul se volvieron una máquina casi imparable. Ese mismo año, en una serie por el título llena de dramatismo, levantaron el segundo trofeo de liga en la década luego del drama de los penaltis contra Pumas en CU.
Los cobros desde los once pasos se hicieron un aliado regio, ya que un año después se vengaron de la Final perdida contra América en 2014 ganando 3-0 a las Águilas en la tanda final, esta vez ante todos los ‘Incomparables’ en el Volcán. Todo esto se logró gracias a un gol agónico de Jesús Dueñas al 119′.
Tras la nueva estrella, vino una polémica Final contra Chivas que les quitó el sueño del Bicampeonato, sin embargo, la parte más dulce de esta historia tuvo lugar en el torneo siguiente, ¿Cómo podía ser mejor? en el Apertura 2017, con una Final de Clásico Regio.
En la casa del odiado rival, y con goles de Vargas y Meza, el conjunto de Ferretti doblegó 1-2 a Monterrey y se coronó en el que probablemente fue el partido más importante de su historia, situación que llenó de orgullo a la institución.
Como no hay quinto malo, el 2019 llegó para apagar el poderío del histórico León de los récords, gracias a un Nahuel inmenso, una defensa impenetrable y un solitario y decisivo tanto de Gignac en la Ida.
A todo esto hay que agregar la consecución de la Copa MX en el Clausura 2014, con una goleada de 3-0 ante Alebrijes, la primera edición de la Campeones Cup ante Toronto FC, y el tricampeonato en el Campeón de Campeones de 2016 a 2018, racha que podría extender contra América en un par de meses.
Quizá la única deuda sería la internacional, con las tres Finales perdidas en la Concachampions y la de Libertadores contra River Plate en 2015, sin embargo, ésto no mancha el brillo de Tigres y su época dorada, que los ha catapultado al olimpo de los mejores equipos que se han visto en la historia del futbol mexicano.
