Un caimán de 3,5 metros de largo irrumpió en una casa en Clearwater, estado de Florida, al romper una ventana en plena noche.
Según medios locales, la dueña de la vivienda, Mary Wischhusen, descubrió al inesperado visitante alrededor de las 3:30 de la mañana. La mujer escuchó un «estruendo enorme y monstruoso», parecido a «como si todo el techo estuviera cayendo». «Me dirigí a la cocina y cuando llegué a la puerta tenía a esa hermosa cara mirándome como si perteneciera allí», contó.
Las autoridades precisaron que el líquido rojo que se ve en las imágenes no es sangre, sino vino, ya que el animal derribó varias botellas durante su captura.